Nosotras y nosotros, los y las en ninguna parte firmantes, luego de arduas reflexiones y profundas cavilaciones, hemos llegado a la siguiente honrosa conclusión: la vaina no ‘ta fácil pana.
Apliquemos la fulana Dialéctica esa que mienta el comandante-pana para revisar la situación post-electoral, veamos los discursos (ideológicos) de los contrarios, revisemos cuales son nuestras prácticas transformadoras (la tal praxis).
Muchos elementos de orden económico, social, político y cultural han incidido en la pérdida de territorio (político) electoral; el malandraje sifrino (con sus pelabolas «sifrinia’os») organizó un discurso político estratégicamente localizado, le metió mucha plata, lo centró en ciertas regiones y clases sociales y tambaleo a los mas indecisos.
Que no nos vengan con el cuentito (ideológico) de que se ganaron un viaje de alcaldías: aquí perdimos terrenos estratégicos, en gran medida por irresponsabilidad de los hijos-de-papá y sus visiones aburguesadas. Y el discurso sifrino postelectoral continúa: «los burguesitos somos unos dulces niños buenos y Chávez es un desgracia’o que no nos entrega el poder papita», pero es que…¿caramba! Esos carajos creen que este pueblo es estúpido y (absolutamente) desmemoriado.
Pues NO: aquí nos acordamos de sus marramuncias económicas, sociales, políticas y culturales; aquí lo que estamos es conscientes de nuestra historia, de las contradicciones que ahora se dan y de nuestras responsabilidades utópicas; aquí lo que queda es enfrentar al poco de pequeños burgueses adecoides que están saboteando con boinas rojas en toiticas las instituciones impidiendo la solución de problemas; aquí lo que queda es afincar las estrategias organizativas y los mecanismos de seguridad estratégica.
La vaina no ‘ta fácil pana, …pero luchando VENCEREMOS.
Pueblo, Revolución y Socialismo NO SE VAN
Apliquemos la fulana Dialéctica esa que mienta el comandante-pana para revisar la situación post-electoral, veamos los discursos (ideológicos) de los contrarios, revisemos cuales son nuestras prácticas transformadoras (la tal praxis).
Muchos elementos de orden económico, social, político y cultural han incidido en la pérdida de territorio (político) electoral; el malandraje sifrino (con sus pelabolas «sifrinia’os») organizó un discurso político estratégicamente localizado, le metió mucha plata, lo centró en ciertas regiones y clases sociales y tambaleo a los mas indecisos.
Que no nos vengan con el cuentito (ideológico) de que se ganaron un viaje de alcaldías: aquí perdimos terrenos estratégicos, en gran medida por irresponsabilidad de los hijos-de-papá y sus visiones aburguesadas. Y el discurso sifrino postelectoral continúa: «los burguesitos somos unos dulces niños buenos y Chávez es un desgracia’o que no nos entrega el poder papita», pero es que…¿caramba! Esos carajos creen que este pueblo es estúpido y (absolutamente) desmemoriado.
Pues NO: aquí nos acordamos de sus marramuncias económicas, sociales, políticas y culturales; aquí lo que estamos es conscientes de nuestra historia, de las contradicciones que ahora se dan y de nuestras responsabilidades utópicas; aquí lo que queda es enfrentar al poco de pequeños burgueses adecoides que están saboteando con boinas rojas en toiticas las instituciones impidiendo la solución de problemas; aquí lo que queda es afincar las estrategias organizativas y los mecanismos de seguridad estratégica.
La vaina no ‘ta fácil pana, …pero luchando VENCEREMOS.
Pueblo, Revolución y Socialismo NO SE VAN
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