sábado, 15 de noviembre de 2008

Lágrimas a nuestros artistas, billetes a los bodrios de afuera

Lágrimas a nuestros artistas, billetes a los bodrios de afuera
por Evaristo Pérez Suárez
La señora Dolores irrigó una lágrima al ver la aclamación a nuestros talentos en los escenarios de España donde se otorgaba el premio príncipe de Asturias a los sistemas de orquesta juvenil de Venezuela. Ataviada en su vestido de semiluto recordó a su hijo cuatrista mientras revolvía el café vespertino en la calidez vetusta de su casa en Maracaibo.
Contuvo su lágrima y dijo: “¡Si pero eso no es porque lo digan ustedes. ¿¡O es que creen que a uno se le olvidó el premiecito ese que le dieron a Venevisión por el video golpista del 2002!?”. La señora Dolores siempre colaboradora en los ensayos espontáneos de los muchachos con tambora y cuatro, disfruta y se siente madre en su fuero interno de todos aquellos muchachones de su vecindario.
Al principio ocultaba lágrimas cuando en sus mejores furias patrióticas Chávez recitaba o medio cantaba a la patria sus identidades copleras. Ahora le sube un poco el volumen para convencer a sus muchachos, presas de la furia antichavista de las televisoras, periódicos y radios, del alma soberanista que advierte en Hugo pero también lo regaña cuando se obnubila sin poner énfasis ante los farsantes internos y los vicios que, por ejemplo, asedian Mercal.
La señora Dolores no pudo entender ayer al leer en Panorama que se anunciaran esos “bichos tan horrendos” con esos nombres inventados que no “cantan ni pizca” ni tienen “ninguna gracia” y que se meterán un dineral con la excusa de la Feria de la Chinita. Y le sube la voz a la imagen de Chávez cuando está hablando en el televisor para decirle cual su abuela : “Fijáte en esa gente que se disfraza de que es de una alcaldía bolivariana en Maracaibo y traen a ese…”¿Cómo es que se llama mijito”?...-agarra el panorama lo inclina para atrás-…: “Aquí dice…y que un tal Wisin (¿o Luisin?) es que ya no veo bien… y que Yandel, y un tal Don Omar…si comoniés! Eso lo que parece es un malandro! ¡En mis tiempos, un Don era un Jesús Enrique Lossada, un Fabricio Ojeda…! ¡Y que es artista internacional, magináte! Y entonces… ¿El Dudamel que será? Ajá y aquí abajo dice… ¿Otra vez esa mujer? ¿Bueno mijito hasta cuando traen para acá a esa tal Olga Tañón…si el sobrino mío que está en la alcaldía me dice que le pagan 800 MILLONES? ¡Sólo a ella y todavía más a los esperpentos esos! Dolores reclama que en cambio los gaiteritos de aquí y el grupito de ellos que cantan precioso y también dicen muy bonito lo social, no tienen “¡Ni pa´ un cuatro viejo!”.
Visiblemente indignada la Sra Dolores fue a echarse el cafecito, me trajo uno y volteó para decirme: “De paso cierran todo 5 de julio y no haya la gente por dónde irse pa´ poner ese escándalo hasta de madrugada… ¡Como si los demás no trabajaran ni durmieran!”.
Agarró el Panorama y puso el dedo índice donde decía: “Alcaldía Bolivariana de Maracaibo. Construyendo la esperanza” y me dijo: “Mi amor…¿Vos creéis que los que hagan esto sean bolivarianos? ¡Botando miles de millones así y a los muchachos nuestros nadie los mira y tienen que ponerse a imitar esos disfraces! ¡Qué esperanza¡”.
“El hijo mío me dice que la mismita botadera de plata la tiene ese tal Henry Falcón en Barquisimeto con la excusita de la Divina Pastora, trayendo gente y artistas que hasta odian a Chávez como el Juanes ese que hasta tiene un jueguito en internet donde él mismo, con su carita de inocentico mata al Presidente. Traen pura basura de afuera, y nadie ya se acuerda del tambor tocuyano, ni del quinto larense, ni de la gaita bonita…ni de nada…Me da rabia esa vaina”.
La señora Dolores miró al Presidente en el televisor, me miró luego a mi con sus ojos verdosos grandotes enrojecidos de la molestia y la frustración, señalando a Chávez y dijo: ¡Ay mijo, abrí los ojos… que esta cuerda de muérganos van a acabar con esto!”.
Evaristo Pérez Suárez
evaristoarte@yahoo.com

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