La conciencia y las dificultades
Las dificultades no son extrañas a los procesos revolucionarios. Durante estas pruebas de fuego, más que en cualquiera otra ocasión, se requieren respuestas en el campo ideológico.
Toda confrontación política demanda respuestas ideológicas. Esto significa un esfuerzo en el terreno de las ideas y no debe rehusarse porque al lado de cada acontecimiento está presente una lucha por la conciencia de los hombres y mujeres, es decir una lucha por ganar su voluntad que, en definitiva, es la palanca para mover la historia.
Los problemas económicos y fiscales derivados de la actual crisis mundial demanda un razonado análisis más allá de circunstancias accidentales. El pueblo venezolano, acostumbrado a ganarse el pan con el sudor de la frente, a sobrevivir en un duro forcejeo, conoce bien la estatura de cada lance de la vida. No es necesario ocultarle la complejidad de la lucha política. Nada más impropio del carácter popular que pretender endulzar las dificultades o intentar evadir las verdades amargas.
En la política, que es una persistente y frecuentemente aguda contienda por el poder, los acontecimientos no transcurren en medio de una cómoda y apacible siesta sino en medio de un tempestuoso y complicado proceso. No es posible concebir la formación de un nuevo régimen en las entrañas de otro y el desarrollo de los instrumentos para su alumbramiento, sin admitir al mismo tiempo el debate por encontrar soluciones victoriosas y dar respuestas valederas a las numerosas interrogantes reclamadas inevitablemente a cada paso.
Las debilidades de nuestro aparato productivo y sus dependencias de la economía capitalista mundial, demandan un análisis a fondo a fin de fortalecer los instrumentos que pueden permitirnos una real independencia y una ruta segura hacia el Socialismo del Siglo XXI. ¿Acaso no será el momento de estudiar detenidamente la riquísima experiencia de otras revoluciones para descubrir hasta dónde llegaron sus errores y éxitos y cómo nuestra revolución puede evitar unos y aprender de otros?
En premier lugar, es indispensable colocar la lucha ideológica en posición preferente para enfrentar cualquier tendencia derrotista, enfrentar la inercia y el burocratismo. Las dificultades del actual período de crisis mundial sólo podrán vencerse fortaleciendo la conciencia social, patriótica y revolucionaria de nuestro pueblo
Las dificultades no son extrañas a los procesos revolucionarios. Durante estas pruebas de fuego, más que en cualquiera otra ocasión, se requieren respuestas en el campo ideológico.
Toda confrontación política demanda respuestas ideológicas. Esto significa un esfuerzo en el terreno de las ideas y no debe rehusarse porque al lado de cada acontecimiento está presente una lucha por la conciencia de los hombres y mujeres, es decir una lucha por ganar su voluntad que, en definitiva, es la palanca para mover la historia.
Los problemas económicos y fiscales derivados de la actual crisis mundial demanda un razonado análisis más allá de circunstancias accidentales. El pueblo venezolano, acostumbrado a ganarse el pan con el sudor de la frente, a sobrevivir en un duro forcejeo, conoce bien la estatura de cada lance de la vida. No es necesario ocultarle la complejidad de la lucha política. Nada más impropio del carácter popular que pretender endulzar las dificultades o intentar evadir las verdades amargas.
En la política, que es una persistente y frecuentemente aguda contienda por el poder, los acontecimientos no transcurren en medio de una cómoda y apacible siesta sino en medio de un tempestuoso y complicado proceso. No es posible concebir la formación de un nuevo régimen en las entrañas de otro y el desarrollo de los instrumentos para su alumbramiento, sin admitir al mismo tiempo el debate por encontrar soluciones victoriosas y dar respuestas valederas a las numerosas interrogantes reclamadas inevitablemente a cada paso.
Las debilidades de nuestro aparato productivo y sus dependencias de la economía capitalista mundial, demandan un análisis a fondo a fin de fortalecer los instrumentos que pueden permitirnos una real independencia y una ruta segura hacia el Socialismo del Siglo XXI. ¿Acaso no será el momento de estudiar detenidamente la riquísima experiencia de otras revoluciones para descubrir hasta dónde llegaron sus errores y éxitos y cómo nuestra revolución puede evitar unos y aprender de otros?
En premier lugar, es indispensable colocar la lucha ideológica en posición preferente para enfrentar cualquier tendencia derrotista, enfrentar la inercia y el burocratismo. Las dificultades del actual período de crisis mundial sólo podrán vencerse fortaleciendo la conciencia social, patriótica y revolucionaria de nuestro pueblo
1 comentario:
Saludos revolucionarios a los camaradas del Circulo Bolivariano Fabricio Ojeda!
Los invito a leer el siguiente articulo: http://esrojoelojo.blogspot.com/2009/04/revolucion-venezolana-tiempo-de.html
Patria, Socialismo o muerte!
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