lunes, 28 de septiembre de 2009

Rumbo a las Empresas Socialistas

RUMBO A LAS EMPRESAS SOCIALISTAS
ALEXIS ADARFIO MARIN
I. En la Revolución Bolivariana llegó la hora de definir, constituir y poner en marcha las Empresas Socialistas para activar el nuevo modelo productivo y desarrollar nuevas fuerzas productivas con nuevas relaciones sociales de producción.
Esta revolución industrial encendida por Hugo Chávez Frías, que tiene epicentro en las empresas básicas del sur, en el macizo guayanés, es un gran reto para los trabajadores y trabajadoras que tienen el privilegio de moldear un prototipo histórico que se ajuste al Plan Nacional Simón Bolívar 2007-2013, cuyo enfoque establece: “La producción en la búsqueda de lograr trabajo con significado, se orientará hacia la eliminación de la división social, de su estructura jerarquía y a la disyuntiva entre la satisfacción de las necesidades humanas y la producción de riqueza subordinada a la reproducción del capital”.
II. La pronta construcción un modelo inicial con vitalidad para avanzar en la transición hacia el socialismo dependerá de la movilización ideológica del colectivo trabajador, tanto para alejarse del capitalismo que impera en las viejas empresas básicas (consumismo, individualismo, saqueo de nuestra materia prima) como para desarrollar las categorías constitucionales de productividad económica y productividad social, en un escenario de eficacia política y calidad revolucionaria de las nuevas empresas.
No será fácil liberarse del esquema de dominación; del yugo de las normas ISO, ni del color de las fichas, menos de los privilegios por jerarquía, tampoco de amor a los bonos, ni al HCM, ni del perfil de cargo, los planes vacacionales exclusivos y de otros tantos señuelos del capitalismo.
A todas luces, construir el modelo de Empresas Socialistas es una tarea para los cuadros mas avanzados de la revolución, con disciplina militante y claridad ideológica reconocida y suficiente para romper con la lógica del capital y asumir la espiritualidad para la liberación social.
III. En este momento, el requisito indispensable es la unidad indestructible de los cuadros revolucionarios (con o sin empleo), para definir el modelo, promoverlo y validarlo en el seno de los demás trabajadores y trabajadoras. La unidad en el gran debate con preguntas centrales sobre la Empresa Socialista Necesaria:
• ¿Cuales decisiones irán a consulta publica o asamblea?. Creemos que solo las trascendentales: políticas para la producción, distribución, consumo e inversión. En las operaciones ordinarias las tomará el ente rector en base a las políticas establecidas.
• ¿Cuántos tipos de empresas socialistas habrá?. Por lo menos: las básicas, las intermedias y las derivadas públicas.
• ¿Cuáles serán los organismos de dirección de la empresa?. Parece lógico: el ente rector, los consejos de trabajadores (Brigadistas de moral y luces, sindicatos, delegados de prevención, ambientalistas…), organizaciones comunales y ministerios de industrialización y planificación.
• ¿Cómo participarán los trabajadores en la designación del ente rector? Bajo el principio de corresponsabilidad, tendrán derecho de postular e impugnar con argumentos validos, pero las designaciones las hará el gobierno.
• ¿Alcance del Control Obrero?
• ¿Cómo administrarán los ingresos?. ¿en una cuenta del gobierno central o en una caja chica?.
• ¿Cuál es la caracterización del trabajo social liberador?
• ¿Cómo será el salario social?
• ¿Cuales áreas cubrirá la responsabilidad social de la empresa socialista y donde?
• ¿Cómo estimulará la participación de sus trabajadores en los consejos comunales?
Dar respuesta colectiva a estas y otras interrogantes, garantiza la unidad rumbo a las Empresas Socialistas.
Bienvenido el Plan Guayana Socialista!

No hay comentarios: